5 formas para combatir la procrastinación

Sabes que es la procrastinación? La palabra misma parece una enfermedad, y este síndrome parece afectar cada día mas a las personas.

Cuando te niegas rotundamente a obedecer la frase “No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy” estás siendo parte de lo que se llama procrastinación, un complejo trastorno del comportamiento, que consiste en postergar de forma sistemática aquellas tareas que debemos hacer, que son cruciales para nuestro desarrollo y que son remplazadas por otras mas irrelevantes pero mas placenteras de llevar a cabo.

Cuando pospones tu cita al doctor aun y cuando sabes que debes ir, cuando no llevas a cabo una reunión por que te produce flojera por saber que será conflictiva, o no estudias en el momento que debes hacerlo para tus exámenes, estas siendo parte de esta dilación de cosas o actividades que “deben atenderse”.

La revista Society 2000 describe este síndrome muy claramente.

El «procrastinador» suele o bien sobrestimar el tiempo que le queda para realizar una tarea, o bien subestimar el tiempo necesario -según sus recursos propios- para realizarla. Éstos son solamente un par de los muchos autoengaños en los que el procrastinador incurre.

Una de las actitudes típicas de un perfil determinado de procrastinador es la excesiva autoconfianza, una falsa sensación de autocontrol y seguridad. Por ejemplo, imaginen que se nos da 15 días para presentar un informe. En nuestro fuero interno estamos convencidos que solo necesitaremos 5 días para hacerlo, incluso menos. En ese momento pensamos «hay tiempo de sobra, no es necesario ni siquiera empezar a hacerlo!». Y se posterga día tras otro una tarea que no solamente no nos ilusiona hacer, si no que, en cierta manera «ya hemos terminado» en nuestra mente confiada cuando ni siquiera hemos movido un dedo por ella. Al acercarse el plazo de entrega de forma peligrosa, de repente, nos damos cuenta de que no seremos capaces de cumplir con la tarea que se nos ha asignado. Entonces pensamos «No tengo esto bajo control, no tendré tiempo!!» y comenzamos a trabajar en ello de forma atropellada, con una gran carga de estrés. En ese momento aparece en escena otro autoengaño, y es el aquél de «Solo bajo presión trabajo bien». Lógicamente, porque realmente no hay otra opción en ese punto!.

Una nueva investigación de la Universidad de Estocolmo ha confirmado que la procrastinación no es sólo una cuestión de gestión del tiempo. En este estudio, los investigadores encontraron que las razones emocionales suelen ser un desencadenante de la dilación, y algunas personas dicen que deliberadamente dejan las cosas para el último momento, ya que trabajan mejor bajo estrés, pero esto solo contribuye a aumentar su propio estrés.

Algunas técnicas para combatir la procrastinación.

El articulo de la revista Inc.edu nos plantea 5 medidas para curar la procrastinación

1. Encontrar la raíz del problema.

Debes en primer lugar ser sincero contigo mismo y entender e identificar lo que estas tratando de hacer y lo que lo estás frenando. No querer pensar esto, solo nos lleva a evadir el problema sin ninguna otra razón consciente. Trata de preguntarte que sentimiento te surge cuando se trate de atender un asunto que has dejado por mucho tiempo. Que es lo que temes si realmente lo haces. Para muchos sino para la mayoría la ansiedad es la principal culpable.

2. Recompensa en lugar de evasión.

Si tu animo se desploma ante la expectativa de llevar a cabo una tarea especifica, lo primero que debes hacer es sanar ese ánimo, piensa que hacer algo, cualquier cosa de esta actividad nos dará una recompensa.

3. Pon atención a las “Creencias Icebergs”.

Un ejemplo de una creencia Iceberg sería cuando dices “Debería tener todo perfecto”, en donde tienes un montón de ideas de cómo deberían ser las cosas en el mundo pero que conscientemente no tienes una idea clara de lo que esto significa y esto nos causa un problema a la hora de actuar.

Esta necesidad de tener cosas de cierta manera antes de tomar cualquier acción te impedirá su progreso y te mantendrá atorado sin poder actuar. ¿Cómo sabes que estás tratando con una creencia iceberg? Los signos incluyen palabras como «debería tener todo perfecto» (te suena familiar?), Esta necesidad de tener las cosas de cierta manera antes de tomar cualquier acción te impedirá su progreso y te mantendrá estancado. Analiza exactamente que es para ti esto y por que lo piensas así.

4. Cambia tu forma de pensar

La manera en la que tu percibes las situaciones determinará tu respuesta a ellas, y en ultima instancia que es lo que haces. Lo que nos pasa a la mayoría de nosotros es que nos quedamos atrapados en trampas del pensamiento o en formas de pensar que no nos permiten avanzar.

En lugar de pensar «Este proyecto es muy difícil, nunca voy a conseguir que se haga», piensa lo siguiente, «Este es un reto, pero es factible, y las recompensas de siquiera empezar bien valen la pena.»

Si piensas lo siguiente, «yo nunca podría hacer esto por mi cuenta», o, «Yo no soy nunca bueno en este tipo de cosas,» apunta a una baja autoestima. Debido a que tu no te crees capaz de hacerlo, y con ello el miedo o la desidia se convierte en una realidad. Si en cambio te dices, «Lo que estoy tratando de hacer no sería fácil para nadie. ¿Quién mejor que yo para llevarlo a cabo? ¿Quién más incluso estaría dispuesto a llevarlo adelante? «

5. Pon las cosas en contexto.

Recuerda que el dolor o la ansiedad que te produce no hacer las cosas que consideras difíciles o azarosas puede ser mayor que el realizarlas, pregúntate a ti mismo, como actualmente son las cosas para ti, como es que va tu vida, tu carrera etc. por la inacción de lograr tal o cual tarea, recuerda que no solamente es una cosa difícil por cumplir sino que se trata de un esfuerzo real en una cosa que te importa.

Así que la próxima vez que te encuentres proponiendo una tarea importante, trata de encontrar la raíz del problema, analiza a detalle las tareas por realizar, cuantifícalas, cambia tu forma de pensar y ponla en contexto replanteando el obstáculo, te encontraras resolviendo problemas que en realidad te tienen agobiado y disfrutaras el tiempo de inactividad mas plenamente.

Algunos otros tips para combatir la procrastinación.

El blog de la revista The Third Metric, nos propone algunas otras ideas para combatir la procrastinación que incluyen los siguientes tips.

1. Establece tus metas de forma escrita

Con esto logras que los objetivos estén siempre presentes, utiliza alguna herramienta en tu móvil como Swipes, que es muy sencilla y te permite desglosar las metas en tareas para conseguirlas.

2. Escribe un plan de acción.

De nuevo, (por escrito) trata de redactar un plan para tus metas, con lo anterior estaremos mucho más propensos a seguir adelante y superar la dilación de las cosas y estaremos menos distraídos cuando hemos detallado los pasos necesarios a seguir.

3. Utiliza la regla de los 15 minutos.

¿Cuál es la regla de los 15 minutos? Establecer un temporizador en el teléfono inteligente, reloj, o cualquier otro dispositivo que tengas a la mano, por solo 15 minutos y ponte frente a la tarea que ha estado posponiendo, sólo 15 minutos. Eso es todo lo que necesitas – 15 minutos.

15 minutos nos permiten crear un impulso. Pero, también es un plazo imposible de romper para hacer cualquier cosa. Todos podemos hacer algo por sólo 15 minutos. Usa esos 15 minutos para analizar y detallar las tareas.

Como dice el refrán, un objeto en movimiento permanece en movimiento, y un objeto en reposo permanece allí.

4. Gestiona eficazmente el tiempo.

Realiza un cuadrante conocido como el Sistema de Gestión de Cuadrante Tiempo, concebido originalmente por el presidente Dwight D. Eisenhower, pero más tarde popularizado por Stephen R. Covey en el libro, Siete Hábitos de la Gente Altamente Efectiva.

En el cuadrante divide tus prioridades en las siguientes categorías.

Cuadrante 1: Metas Importantes y urgente – crisis y los problemas a corto plazo

Cuadrante 2: Metas Importantes pero no urgentes – objetivos estratégicos a largo plazo (basado en lo comentado estas pasan siempre al cuadrante 1, evítalo a toda costa!).

Cuadrante 3: Metas No Importantes pero urgentes – Las distracciones e interrupciones

Cuadrante 4: Metas No Importantes Ni Urgentes – Actividades pérdida de tiempo

5. Une fuerzas con un amigo.

A menudo, nos va mejor cuando contamos con alguien más para motivarnos y nos empujan a hacer las cosas. Es por eso que algunas personas confían en los profesionales, tales como los entrenadores y entrenadores personales para ayudarles a alcanzar sus metas.

Mientras que la contratación de un profesional es una gran manera de superar la dilación quitando el elemento de elección, no todo el mundo puede permitirse el lujo de hacerlo. En ese caso, busque un amigo que puede actuar como su cómplice. Unir fuerzas con ellos pídele te apoye y acompañe a realizar una tarea difícil o dolorosa para realizar.